Me pides el mar,
pero no puedo darte más que tristes tardes, frustraciones, momentos inútiles en
una mesa con tarros de medio litro; lo se, soy un tipo desgraciado. Me has
visto beber tanto, que seguro, cuando encuentres a uno bueno… un buen
hombre,le odiaras cuando descorche un
tinto de 50 pesos y sin saber tomar la copa te diga que esta “bueno”. Yo ya
estaré muy lejos, como ahora de tu recuerdo, por que si me recordaras no me
dejarías tanto a la deriva; es tancierto aquel poema de Hugo Gutiérrez Vega: “No somos más que un pañuelo
agitado por el viento de los muelles. Nuestro deseo es llegar, pero siempre nos
vamos”. Aunque yo
si sabré tomar una copa, pero igual me sabrá amargo, con un regusto de cierto
dulzor… el dulzor que nunca tedi. En
que momento me convertí en un beat; odio tanto que hablen ahora de los hipsters,
si ni si quiera saben todo el origen de “los ángeles de la desolación”. Yo no soy un ángel, pero si un desolado,
uno de esos pañuelos que Hugo Gutiérrez Vega describía en su poema:
No somos más que un pañuelo
agitado por el viento de los muelles. Nuestro deseo es llegar,
pero siempre nos vamos.
Somos una risa interrumpida por el invierno;
una mañana con sol súbitamente invadida
por los ejércitos de las nubes;
una tarde tranquila sorprendida por la lluvia;
una noche con la luna cubierta
de pronto por el temporal.
Pero somos y eso no nos lo quita el viento. No seremos, pero hemos sido.
Sirva esto para seguir andando
por el camino siempre interrumpido,
para saber que nuestros ojos
siempre podrán distinguir
las figuras que viven en la otra orilla del abismo.
“Tu silencio es mi tortura”, eso fue lo último que recuerdo haber escuchado
cuando me solté llorando, y no le doy la culpa a la mota, menos al alcohol,
simplementealgo de todo lo contenido me
explotó, tus ausencias, caminar sin rumbo, sin saber si estarás o no, la falsa
felicidad que muestro tras unos tragos y me hago el duro; todo eso se fue a la
mierda aquel día, y me he quedado desprotegido, como “aquel pañuelo” sin saber
a dónde llegaré.
Espero poder distinguir la otra orilla del
abismo, si no pronto, daré un paso en falso. No se si estarás tu del otro lado,
esperando verme caer.
Esta tarde por casualidad me encontré con Aide, ya hace más de 9 años que no la veía, algunas veces he
soñado con ella, y siempre fue algo
amargo; supe tiempo después que su madre intentó hacerme un trabajo de bujería,
la señora estaba encantada de que su hijita
estudiante de la uam anduviera con un perdedor pero que al menos en esos
momentos le dinero fluía bien, viajaba a europa una par de veces al año y
además había quitado del paso a su novio, un militar que alguna ocasión me retó
a golpes via mail. Que horrible “batirse a duelo por el amor de una mujer”, así
que no pasó más que unos meses en los cuales yo parecía un zombie tras de ella,
me tenía amarrado; su hermana Nadia me odiaba un poco ya que comencé saliendo
con ella, nada serio, solo sexo sin ningún compromiso. Conocí a Aide en el
museo de la ciudad de México, en un evento de fuga donde junto con Astro y
Ajusco presentamos un numero del fanzine; inmediatamente me engancho, era más
atractiva que Nadia, más maliciosa, más bebedora. Y fue así como durante meses
fue de las cosas más desgraciadas que he vivido con una mujer; el sexo a
comparación de su hermana, era espantoso, alguna vez escribí un poema llamado “necrofilia”, y así parecía, una muerta,
incluso me cansaba de estar metiendo y sacando, prefería en la Toshiba satellite poner el dvd de baise moi para poder terminar; hubiese estado
horas y horas penetrando y ni un suspiro
hubiese arrancado a aquella mujer de la cual ya no se si fue que me enamoré o
la brujería de su madre fue tan efectiva que se me nublaba todo por Aide.
Esta últimas vez que nos vimos, solo cruzamos
miradas, no siento ya nada por ella, ni si quiera algo de compasión, casi como
cuando vi por última vez a Lorena, fue exactamente cuando Zaira desde Zurich
vino a visitar México DF. Tan no me
importaba que convivimos bien, y aún así Lorena alias “Miss Courtney” hizo de las suyas, me dejaron
varado en la desaparecida pulquería al
lado del Alicia que ahora es el Dada.
A la mañana siguiente que Zaira voló a Zurich no llegué al aeropuerto,
lamento no haber despedido a Zaira, pero no
lamento haber perdido contacto
con Lorena; y sí, estando con ella, me visitaba “la mujer triste” y muchas veces
quise regresar al sexo y olvidarme de “Miss Courtney”, fue muy tarde ya aunque
mi despedida con “la mujer triste” fue curiosamente antes de una
de las primeras veces que salía con Ayesha; nos dimos un último beso, la
dejé en el metro Cuauhtémoc y conduje rumbo a Alvaro Obregón. Cerca de la casa
del poeta ya me esperaba Ayesha, fuimos a la comida china en la calle de
dolores y después no se si follamos en
su casa, ambos estábamos muy ebrios mientras walking wounded de everything but the girl sonaba.
Vi a Ayesha hace un año aproximadamente, Arlette y yo
llegábamos al Corona y ella salía, la vi “fea”,
seguro por que ya me significaba y significa poco, No se porque tengo esa suerte
de encontrarme a ex mujeres, la mayoría me odian por ebrio, por nunca haber
sido un tipo “normal”, o simplemente porque en el fondo nunca me quisieron,
¿alguna vez se habrán imaginado sobre mis infidelidades? No lo hacía por joder, solo era porque me
sentía mejor con otra mujer; además yo solo era su “aspirina” para olvidarse un
poco de lo cotidiano.
SIEMPRE HE
QUERIDO SER NECROFILO
Juan Beat
Tenía toda la intención de quedar en buenos términos con Aide,
pero la madrugada de ayer me ayudó a aborrecerla;
y no solo fue la madrugada,
sino Aide misma;
cuando la encontraba,
yo pretendía tratarla con el mismo “amor” con el que siempre la
traté,
pero ella me “noqueaba” a la primera;
desgraciadamente soy de esos tipos que
cuando se sienten ofendidos arremeten con todo;
combatí a mi manera,
dije algunos insultos,
comentarios burlones y sarcásticos;
pero mi KO se llamó “cleaner.exe”;
no se mucho de hackear computadoras,
pero cualquiera:
pseudo escritores,
amas de casa,
ayudantes de intendencia,
pueden aprender a hacerlo.
Aún no se si funcionó totalmente mi “golpe”,
pero al menos es más divertido
que fornicar
y que al sonar teléfono ella tenga que pararse a contestar;
de todos modos fue como hacerlo con un muerto,
----gracias Aide, siempre he querido ser necrófilo-------
Las mujeres son como gatos, solo cuando quieren pasan el tiempo conmigo, cuando no, ignoran y pasan de largo, son independientes, pueden vivir sin mi, sin extrañarme.
Las mujeres son unos gatos negros, acechando al anochecer, aprovechando su fino olfato para desechar la carne podrida, como la mía, inservible mal oliente, alcohólica y nunca redimida.
El sábado
por la mañana se me ocurrió borrarme de face-fuck y hotmail, después de hacerlo me sentí reconfortado;
cuántos años no prescindí de todos esos artilugios tecnológicos, era mejor
antes, con un discman, una carpeta de cds originales y un par de libros en la
mochila. A veces quisiera regresar a esa sencillez y monotonía, el mismo
recorrido por el metro, con los audífonos a todo volumen y perdiéndome de toda esa salvaje gente que solo
por inercia andan a sus trabajos o a sus citas de amor. Como me hubiera gustado algún día enfrentarme a una mujer, pelar, decirle todo lo que podría
odiarla y ella recordándome lo egoísta
que soy, para después de breves
silencios, mirarnos y sin decir mucho
caminar hacia un hotel barato para
olvidar todos los desamores presentes… pasados, y simplemente
follar; que bueno es simplemente el sexo, sin preocuparse de más sobre el amor
o los desencantos tras años de alguna
relación. Ray Loriga tenía razón cuan leí Tokio ya no nos quiere: “No hay nada mejor que follar con una mujer
triste”, a esas mujeres no les importa más que llegar a un orgasmo, al
final nunca recibí un abrazo de las mujeres tristes, pero no me importó, esos
momento eran los únicos en los cuales
algo funcionaba. Las peleas, los lloriqueos, los arranques impulsivos dentro
del auto pasaban a segundo plano cuando veía sus rostros de satisfacción al
penetrarlas, aun cuando después de
retirarme el condón todo volvía a la normalidad, la frialdad, la locura y la
incertidumbre. No obstante, yo sabía que hasta “el final” y aún con enojos,
habría un poco más de sexo sin pretensiones amorosas durante los 5 o 20 minutos que durara; creo nunca he
sido un buen “amante”, pero algunas veces funcioné bien, mi vieja cámara de
video solo corría y corría la cinta, es
“el mejor” testigo de mis buenos momentos como un tipo que sabía follar.
Ahora no se follar, no se querer, tampoco se pertenecer, no puedo
presumir tampoco de total fidelidad, incluso estando con Ayesha, alguna vez
intenté desesperadamente vincularme con una mujer que mucho tiempo atrás me
gustaba, me decepcioné, la vi acabada, y aunque dormimos juntos y
desayunamos unos horribles chilaquiles
que ella preparó; no pasó más allá de quitarme los pantalones para ponerme un
viejo y raído pants morado de ella. Mientras desayunaba esas horrible masa,
llamó Ayesha, le inventé cualquier cosa, no quise que supiera que aún estando
con ella me sentía tremendamente solo, tanto como para dormir con un mujer que había visto un par de
veces y le engañé que sabía perfecto italiano, ja… yo solo sabía decir: “Mi sei entrata nel cuore come un colpo di coltello”. Ella no se enganchó, menos yo, ha
sido una de las citas más patéticas que he tenido. Y así con Grissa, con Lorena
y con Aide, alguna vez tuve una
infidelidad. Cuando aún Idalia estaba conmigo, Cinthia, Rebeca y Rosalba
insistían en algo, seguro solo era meterles mano y olvidarnos, sin embargo, aún
sabiendo que esa relación era como una canoa a la deriva, no pensaba más que en la
satisfacción inmediata, como todo un “ser humano” en una teoría de elección,
para qué elegir lo que a largo plazo me daba más seguridad, yo solo necesitaba
mi dosis diaria. Actualmente me siento como una rata en una tina llena de agua con indefensión aprendida, no
tengo ningún control de las consecuencias de
mis actos, haga lo que haga, todo estará igual.
Soy un villano, el antagonista de
noches “felices”, nunca he buscado eso,
solo desearía follar y después recibir un abrazo mientras duermo plácidamente. Si
después “ella se va” está bien, no soy ni si quiera un buen amante, menos, un
hombre al que se le dediquen mañanas durante años.
El
martes por la tarde creo he tocado fondo de este mal momento, después de ver The Raven por la tarde, y beberme 2 de
tinto, una minerva, una duvel y algo de scotch, se me ocurrió poner un bluray
de Christian
Thielemmann dirigiendo a la Wiener Philharmoniker tocandosinfonías de Beethoven, me entristecí tanto
que siguió Bjork en el Royal Opera House y ya muy ebrio, lo cual no entiendo
tanto, ya que muchas veces bebo más y no pasa nada, me atreví a poner a Juan
Carlos Coronel con cancionesque
interpretaba José José, no lo terminé de ver, me comencé a sentir muy mal,algo así como un tipo desgraciado frente a un
vaso lleno de cerveza, y lo peor, me entró un horrible dolor de cabeza y creo
estaba fuera de mis cabales, así que puse un par de cobijas en el suelo y me
tiré. Dormí horrores, realmente no tengo idea bien, pero más o menos delas 9 pm a las 9 de la mañana del otro día.
No me levanté con resaca, tan asi que lo primero que hice fuetomar mi hacha y en la azotea cortar sendos
pedazos de vieja leña para mi boiler que aún conservo; creo que me comienza a
entraruna especie de desolación y pesadumbre
por las tardes ya que :“Tu no tocas a mi
puerta, ni me preparo para salir y verte por bellas artes”, y me doy cuenta
de que esa rutina quizá le fastidió, siempre verme beber cerveza,borracho varias veces, impertinente otras
ynecio. No se que tanto yo he tirado
por la borda lo conseguido o no se que tanto su desapego sea más coherente; yo
he intentado eso y no es parte de mi, por eso ahora ando sombrío,
emborrachándome con poco, durmiendo mucho, tratandode sacar “furia contenida”, aporreando unos trozos
de madera con una filosa hacha.
Según en mi carpeta de mp3
tengo más de 15, 000 canciones, y por ahora mi play list es el mismo, todo lo
que me recuerda lo infeliz que se puede ser día tras día y en hacer más duras
las ausencias. La semana pasada no pude dormir nada varios días, me puse como
loco a pasar canciones de you tubea mp3,
las edité un poco y las pegué, hice un largo track de unos 20 minutos, lo
agregué en un attachment y al darle send, pensé que quizá sería una especie de
declaración, mejor que escribir una carta o unpoemaal que a nadie le importa.
El mail llegó y hasta hoyno ha tocado a mi puertay mucho menos me espera en bellas artes,
nunca le he visto quitarse unos audífonos al encontrarla, quizá guarde mis
tracks y los cds en un cajón con llave y solo los escuche para recordar lo
mierda que he sido con ella.
Aún
recuerdo un poco del dolor cuando hace ya más de 12 años, simplemente Idalia no
apareció más; nunca le he juzgado, por eso mismo nunca le pedí que lo dejara,
yo no podía quitarlesu vínculo de 7 u 8
años juntos. Bastante hizo con llegarvarias mañanas y enloquecer un poco a mi lado, eran días duros,
despertaba con ansiedad solo esperando el ring del teléfono y contestar
escuchando “llego en un par de horas”, y no hacía más que esperar, derrumbado
en cama, entre cobijasrevueltas de
semanas. Idalia siempre llegaba con algo que me gustaba, más aún yo la
necesitaba, dependía de ella; muchos años después supe por qué no llegó más a
casa; por su puesto que enloquecí en
realidad muchos años, rondaba por su casa, le mandaba cartas y supe que era la
primera vez que experimentabala innegable
condición de amor-desamor.
No
aprendí mucho, incluso, ya con Grissel a mi lado, lo eche a perder por vivir de
recuerdos, Grissa era una santa, lo digo por que soportarme entre depresiones,
ansiedades, enojos, actos impulsivos y mi memoria con Idalia, pocas lo
soportarían. Años después, entre fracasos, relaciones muy quebradas,
sentimientos de culpa ypesadumbre,
apareció Karina, fue justo cuandodejé
mi necedad de no pertenecer a la clase académica (como lo hice gran parte de mi
estancia en la facultad) y me dediqué a lo poco que faltaba para titularme.
También enloquecí un poco con Karina, no se por queme convertí en un celoso de mierda y no se por que
pensaba que aún tenía algo con su ex novio, al cual odiaba sin justificación
alguna; y fue ahora a mi a quien le tocó “cuidar a Karina” como a una niña,
pasaba más tiempo deprimida y ausente, que en sus“cabales”, pero no me importaba, yo la
quería, nuestro refugio era la colchoneta, una grabadora y los recorridos en
auto, casi como si fuese una “road
movie”.Llegó el momento en el que
como aquel flamenco: “se nos rompió el
amor de tanto usarlo, de tanto abrazo loco y sin medida”; Karina en un
punto clave me dejó fuera de su vida por un día, yo no pude más la odié y
desaparecí; al final ambos supimos que fue para bien, al menos para ella, porque
encontró un soporte para toda su forma de vida. deprimida y ausente, aba m a quienle tocin justificacie a de
culpa ypesadumbre, aparecicas lo
soportara, lo digo por que sopor
Yo lo
único que encontré fueron affaires, a Lorena, a Ayesha, mi mano destrozada en
15 pedacitos… sobre eso, ya todo está dicho. Actualmente me comienzo a sentir
abandonado, desolado, de nuevo con pesadumbre; no por nada hace un par de
semanas exploté y no hubo más que lloriquear, Astroman X bien me dijo hace
muchos años cuando platicábamos por icq: “tu
da todo lo que tienes que dar, sin concesiones, si no recibes lo mismo ya no es
tu problema… llega un punto que se irá diluyendo y se convertirá en recuerdos,
llenos de paquetitos de dolor, y así quizá ya no te importe más ella, pero tu
diste lo necesario”
No me
gusta que de nuevo se repitan esos flashbacks sobre el locura y pérdida,
tampoco me gustarían más de esos paquetitos de dolor, ya no sabría donde
colocarlos.
OFFLINE JUAN BEAT Te fuiste no quisiste más leer mis pendejadas, te despediste con: es imposible hablar así, te vi offline, y sentí pena de mi, de joderte a cada rato, de hacerte infeliz; y que prefieras a uno más que a mi, y lo entiendo, yo siempre he cosechado rosas en el jardín de la muerte, rosas que no debería regalarte, pero, me gusta pensar en mi muerte, y ese es mi regalo: el desapego. Y si, eres la mujer amorosa de mi vida, pero yo, no soy más que el primer trago, el que todos olvidan, y ni si quiera una resaca puedo darte. Espero pronto, aparecer siempre offline, apagado de mi vida, todo es tan fácil, como un colpo di coltello atravesando mi cuore, inservible, maniático; desecho, por no amanecer contigo una vez más.
Juan
Beat comenzó a beber tarde, pero de los 20 años a los 25, ya había cultivado
una hermosa úlcera gástrica, solía andar por las calles enfundado en una
brillante máscara de Huracán Ramírez. La pocas y buenas mujeres que lo habían
conocido, no le soportaban su histrionismo y mucho menos su ego aferrado por
creerse un escritor, y no era más que un mediocre en busca de mala fama. Gran
parte de su tiempo lo mal gastaba en teclear malos poemas en una Apple II y
visitar a amigos. Uno de ellos era al “Rey del Surf”, en su buenos años había sido un gran
luchador y siempre la antítesis del Santo. Ahora, bajo la máscara de Blue Demon
“se escondía” un
escritor que conmocionaba a toda una generación de jóvenes perdedores,
desencantados con la sociedad y que intentaban ser incendiarios.
En la calle de
Isabel la Católica, tras una enorme puerta de madera vieja, el Rey del Surf se agazapaba de la fama, Juan Beatllegó un viernes por la tarde, sin
problemas entró en aquel edificio y recorrió piso por piso observando las
placas, los reportes periodísticos, las fotos, las máscaras que el Rey del
Surf había ganado
durante su basta carrera como luchador; ese gran edificio era un museo de toda
una vida en los encordados, incluso, resaltaban las cartas totalmente
literarias que aquel hombre enmascarado había intercambiado con Mil mascaras,
Dos caras, Chris Bennoit, Eddie Guerrero, entre otros.
Al
empujar la puerta, Juan Beat encontró al Rey del Surf tirado en un catre, llevaba un jersey de
los N.Y. Rangers y sus calzones raídos. Se saludaron, derramando un poco de
tinto sobre el piso. -----Pásame esa tasa----le dijo el Rey del Surf a JB. Él tomó la tasa con el logo de los
tigres de la UANL, sopló dentro, esparciendo bastante polvo. El Rey del Surfle sirvió a JB una gran dosis. -----A qué vienes, qué haces por acá…si
necesitas dinero no tengo, tuve que mandar un guión para una de esasnovelas semanales que lee toda la
gente, pero no me ha llegado el dinero, por cierto, no viste una chica de tetas
pequeñas pero firmes, parada en la entrada del edificio, me debe algunos pesos
y no me los ha pagado, cree que convenir a tirarse unos pedos y levantarse la falda para que le chupe su coño
ya me doy por satisfecho,cuando
te vayas, si la vez dile que es una puta----
Juan
beat solo esbozó una sonrisa, sacó unas cuántas hojas y se las mostró alRey del Surf. ----- Son mis nuevos poemas-----. El Rey
del Surf los tomó, se
limpióel vino que le escurría por
la barbilla y comenzó a leer en voz alta:
La gente que gasta servilletas
blancas es más confiable.
Por Juan Beat
Quien demonios puede confiar en un
poeta
quese sienta frente a una apple II a escribir,
abre unalata de cerveza,
se rasca el culo,
y ocasionalmente se masturba;
al final ,
se limpiael semen con servilletas blancas,
¿Alguna "dama" podría
confiar en gente así?
por cierto,
creo que terminaré este poema
para ir por una servilleta
blanca.
----Que mal poema, es lo peor que he
leído últimamente y eso que diario me llegan cartas y cartas de "poetas y
escritores"que intentan que
les ayude a publicar. Lo que no se imaginan, es que cada carta que llega la
pongo en una bolsa de plástico y hago un combustible para el viejo boiler de leña. ¿Recuerdas
los combustibles? Eran unas bolsas amarillas que estaban llenas de aserrín. Eso
hago con las cartas, incluso con el recibo de luz. Dejemos de hablar y vamos al
"pájaro". ¿Lo conoces?------
----Si, es un "bar" de tabla
roca que esta en República de Perú, frente a la coliseo.-----
Caminaron sobre Isabel la católicay llegando a la esquina de Perú dieron
vuelta hacia la derecha. ---- ¿Recuerdas la última vez que estuvimos en al
coliseo?---- dijo JB. -----Si, fue el día que te enfermaste de sarna------
contestó el Rey del Surf
Juan Beat y El Rey del Surf entraron al pequeño bar, todos,
admirados, murmuraban acerca de aquel tipo con máscara de Blue Demon; en el
escenario un soldado raso le hacía una felación a un transexual mientras sonaba
surf raider
interpretado por “The Magnifics”. Juan beat vomitó, aún enmascarado pasó la
manga de la sudadera quitándose el excedente del vómito, el Rey del surf solo hizo un gesto de desaprobación pero
pidió un par más de a litro. Mujeres se acercaba al Rey del Surf, las bandas le solicitaban en el
escenario para que les hiciera el honor de acompañarlos con un poema, no
obstante, él se desentendía, daba tragos a la caguama alternado con vodka tonic
de oso negro. JB y el Rey del Surf bebieron hasta que la mayoría de los
asistentes en el pájaro se recostaban en el piso y follaban.
Muy temprano, aún con un poco de resaca
“curada” con unas líneas de coca, Astroman X, enmascarado y mejor conocido como
el Rey del Surf, viajaba a N.Y para encontrase con su amigo Bret Easton Ellis
quien lo alojaría en su penthouse y esperarían a Los Bomboras para su show en
el Madison Square Garden.
Juan Beat caminó hacía el 115 de Perú, a
él nadie lo conocía, incluso Idalia lo había echado de su vida; no obstante,
como cada mañana, esperó frente al edificio para solo verla salir.